El proyecto ‘Eres lo que tiras’, una iniciativa de las áreas de Medio Ambiente y Sostenibilidad y Educación del Ayuntamiento de Arona, concluyó tras seis sesiones formativas desarrolladas con el objetivo de concienciar a la comunidad escolar del municipio sobre la reducción, reutilización y el reciclaje de los residuos. La jornada final, celebrada en el CEIP Los Cristianos, consistió en un concierto en el que tocaron todos los instrumentos de Alexandro Ferrato, un percusionista creativo que trabaja con objetos reciclados, que hizo una pequeña presentación de su trabajo y luego el concierto. Además, el alumnado participante recibió como obsequio un trompo hecho con tapas de plástico de botellas como agradecimiento y muestra de lo que se puede hacer con los residuos.

El proyecto, impartido por Eköoké Estudio Sostenible, busca concienciar a las unidades familiares, a través de sus hijos e hijas sobre la importancia de reducir los residuos, así como trabajar las posibles reutilizaciones de los desechos (envases) como materia prima antes de pasar a formar parte de la basura.

‘Eres lo que tiras’ se llevó a cabo inicialmente en los centros CEIP La Estrella, CEIP Los Cristianos y CEIP Chayofa con alumnos de 4º y 5º de Primaria, con un máximo de 80 alumnos por colegio. El objetivo es llegar a una población de aproximadamente 1.500 personas, pues se pretende llegar a las familias y a su entorno más cercano desde el alumnado como personas protagonistas de la historia.

Tanto la primera teniente de alcalde y concejala de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Clari Pérez, como el concejal de Educación, Héctor Reyes, destacaron “la importancia de que a edades tempranas se empiece a trabajar en la concienciación de todo el alumnado para que se desarrollen con un alto sentido de la responsabilidad en cuanto a la gestión de los residuos se refiere e inculcar esa idea de reducir, reciclar y reutilizar los residuos a través de estos talleres. Han sido unas actividades divertidas, que han tenido una muy buena acogida por toda la comunidad educativa. Pretendemos seguir con nsestra idea de darle continuidad a este tipo de iniciativas, que pensamos desarrollar en los próximos años en todos los colegios del municipio”.

En la primera sesión se trabajó en fomentar la participación de los jóvenes en la gestión de residuos para que sean conscientes de la cantidad de basura que se puede generar en una semana en una unidad familiar, de manera que comprendan la importancia de reducir y no tanto de reciclar. También en que el alumnado traslade sus inquietudes y aprendizajes a las unidades familiares, de manera que ellas sean las protagonistas de la historia y, con ello, se refuerza una red comunitaria. En la parte final se hizo un pequeño concierto de instrumentos musicales reciclados con objetos-residuos inorgánicos.

La segunda sesión llevaba por título ‘¿Qué puedo hacer yo?’ y en ella se planteaba la necesidad de saber qué podemos hacer como personas que queremos mejorar nuestro día a día en cuanto a los residuos que generamos; de cómo debemos consumir para elegir los productos que sean más duraderos, de mejor calidad y que generen menos residuos, y también pensando en nuestro bolsillo, lo que cuestan las cosas.

La tercera sesión abordó diferentes actividades relacionadas con la percepción social de los residuos. Se trabajó como idea fundamental, qué percepción social tenemos de los residuos y de una manera divertida como tratar de minimizarlos. Para ello se desarrollaron dos talleres musicales: uno dando una segunda vida con los residuos que cada equipo de seis personas tenía en la mesa para la fabricación de un objeto que sonara; y otro, haciendo sonar los utensilios de la cocina que ya no usamos.

¿Qué podemos hacer como sociedad? Fue el lema principal de la cuarta sesión.  Entre las acciones desarrolladas esta semana se visionó un vídeo sobre la problemática que están causando los microplásticos a las aves que alimentan a sus crías con mecheros y trozos de estos materiales. También se les pidió que escribieran una carta a una persona o empresa que tenga posibilidades de cambiar la sociedad para así minimizar la huella generada.

El principal objetivo de la quinta sesión fue actuar en el entorno local. El alumnado se vuelve protagonista para ver cómo está el entorno más cercano de su colegio con ojos de detectives de residuos. Se desarrolló una salida de campo para analizar los residuos de la zona a través de una recogida selectiva por parte del alumnado. Para ello, usaron guantes y bolsas separando papel y cartón, plástico, metal, cristal, orgánico y otros, durante 30 minutos de trabajo activo.